Las joyas del asfalto, el glamour y la elegancia –aderezado todo ello con una pizca de nostalgia–, han marcado el día a día esta semana en el Son Vida Golf Club, que acoge por primera vez la ‘Mallorca Classic Week', cita ineludible para los amantes del motor y, en especial, de los vehículos clásicos.
Sobre el verde, a pocos metros del restaurante, este sábado se dispusieron más de cuarenta coches clásicos que participaron en el International Concours d'Elegance. «Este certamen nació en 2016, a raíz de la pasión por los coches clásicos, tanto mía como de mi socio en la organización, Roman Hummelt. No son solo vehículos, sino piezas históricas; ponemos en valor su conservación y también le pasamos el testigo a los jóvenes, encargados de mantener este patrimonio», afirma Alvaro Middelman, organizador del evento.
Mientras un jurado internacional valoraba los vehículos basándose en su estado de conservación y el grado de fidelidad con el modelo original, los aficionados observaron y fotografiaron joyas como el Mercedes Nürburg de 1928, o el modelo 190 SL; el Ford 427 Cobra, el Thunderbird o el emblemático Modelo T, producido entre 1908 y 1927, y que popularizó la producción en cadena; un exclusivo Jowett Javelin de 1947, o los BMW 507, de 1959, y el BMW 328, de 1983, enviados por uno de los socios fundadores, BMW Group Classic. El grupo Motorworld Mallorca también envió vehículos de su colección. La jornada también fue solidaria: a la entrada al recinto, el público podía realizar una donación para Mallorca Sense Fam. Sobre las 14 horas se dieron a conocer los ganadores y el primer premio, bautizado como Russell Stevens «en honor a este extraordinario forofo de los clásicos que nos dejó demasiado pronto», fue un Porsche 911, con la peculiaridad de mantenerse tal y como salió de fábrica. El propietario recibió un par de entradas, valoradas en 2.000 euros, para el Concorso d'Eleganza en Villa d'Este 2023, que se celebra a orillas del lago italiano de Como.
Pero la ‘Mallorca Classic Week' ha sido más que un concurso de coches. El jueves tuvo lugar la Russell Stevens Memorial Drive, un paseo que llevó a los asistentes hasta el Puig de Santa Magdalena; el viernes se celebró un Torneo Vintage de Golf, en el que jugaron con palos Hickory de los años 30, y hoy se realizará otra tranquila ruta hasta Randa.
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Aquests són els beneficiaris de les polítiques de la dreta. Els hi baixaran els impostos perquè puguin mostrar la seva colecció de cotxes als pobres treballadors explotats que els voten