El organismo sanitario internacional de Naciones Unidas ha justificado su decisión basándose en que viruela del mono causa una serie de problemas a varios niveles: «Cuando el brote de viruela del mono se extendió a principios de este año, se observó y se informó a la OMS de un lenguaje racista y estigmatizante 'online', en otros entornos y en algunas comunidades. En varias reuniones, públicas y privadas, varias personas y países plantearon su preocupación y pidieron a la OMS que propusiera una vía para cambiar el nombre».
La asignación de nombres a las enfermedades nuevas y, muy excepcionalmente, a las ya existentes, es responsabilidad de la OMS en el marco de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE) y de la Familia de Clasificaciones Internacionales Relacionadas con la Salud de la OMS, a través de un proceso consultivo que incluye a los Estados miembros. El organismo dirigido por Tedros Adhanom Ghebreyesus ha celebrado una serie de consultas para recabar las opiniones de varios expertos, así como de los países y del público en general, a los que se invitó a presentar sugerencias de nuevos nombres. Sobre la base de estas consultas, la OMS ha recomendado adoptar el nombre de 'mpox' para sustituir a 'monkeypox', tras un periodo de transición de un año.
«Esto sirve para mitigar las preocupaciones planteadas por los expertos sobre la confusión causada por un cambio de nombre en medio de un brote mundial. También da tiempo a completar el proceso de actualización de la CIE y a actualizar las publicaciones de la OMS», explican. El término mpox se incluirá en la CIE-10 'on line' «en los próximos días». Además, formará parte de la versión oficial de 2023 de la CIE-11, que es la norma mundial actual para los datos sanitarios, la documentación clínica y la agregación estadística. Normalmente, el proceso de actualización de la CIE puede durar varios años.
En este caso, el proceso se ha acelerado, aunque siguiendo los pasos habituales. En cuanto a la traducción del 'mpox' a otras lenguas, como el español, la OMS asegura que «puede utilizarse en otros idiomas». En cualquier caso, ha avanzado que «si surgen otros problemas de denominación, se abordarán mediante el mismo mecanismo». «Las traducciones suelen discutirse en colaboración formal con las autoridades gubernamentales pertinentes y las sociedades científicas relacionadas», remachan.
La viruela del mono recibió su nombre en 1970, después de que el virus que causa la enfermedad se descubriera en monos cautivos en 1958, y también antes de la publicación de las mejores prácticas de la OMS para la denominación de enfermedades, publicadas en 2015. Según esta guía, los nuevos nombres de enfermedades tienen que «minimizar el impacto negativo innecesario de los nombres en el comercio, los viajes, el turismo o el bienestar de los animales, y evitar causar ofensa a cualquier grupo cultural, social, nacional, regional, profesional o étnico».
Antes del brote mundial de viruela del mono de este año, ya había un proceso en marcha para reconsiderar la denominación de todas las especies de ortopoxvirus, incluido el virus de la viruela del mono. En agosto, un grupo de expertos mundiales convocados por la OMS acordó nuevos nombres para las variantes del virus de la viruela del mono. Se llegó a un consenso para referirse al antiguo clado de la cuenca del Congo (África central) como clado uno (I) y al antiguo clado de África occidental como clado dos (II). Además, se acordó que el clado II consta de dos subclados, IIa y IIb.
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Ahora hasta hablar de monos será racismo. Estamos todos locos.