Imagen del tablero y las cartas del juego.

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La tradición popular de las Islas es el telón de fondo de Aïllats, el nuevo juego de mesa en el que Ramón Llull es un «poderoso mago» que, sin querer, en uno de sus viajes, abre el «libro de las sargantanes malditas de Cabrera», lo que desencadena una tormenta en la que personajes malignos como Maria Enganxa y el dimoni Cucarell, poseen a todos los habitantes de Baleares. Los jugadores tendrán que reunir a un ejército de personajes «buenos», representados por elementos icónicos de las Islas, como la cabra Myotragus, la ensaïmada y la Avarca menorquina, para liberar al Archipiélago de la destrucción.

«Las Islas son ricas en cultural popular y no da para que todo quepa en el juego, pero es una pequeña selección muy útil para que la gente de fuera, pero también nosotros mismos, aprendamos un poquito más sobre Baleares», según explica el ideólogo de Aïllats, Toni Perelló. Apasionado de los juegos de mesa, este maestro de Infantil, siempre que viaja a algún lugar, busca un juego creado por autores locales. «Me gusta coleccionarlos y pongo la fecha y el lugar de donde los compré», confiesa, y explica que en una visita a Menorca descubrió una especie de Trivial sobre la isla que le animó a idear un juego que fuera de ámbito balear. El hecho de haber trabajado como interino en Formentera e Ibiza, ser de Mallorca y conocer Menorca, le ayudó mucho.

Toni Perelló, ideólogo de 'Aïllat'.

El ilustrador Robert Campillo, conocido por sus dibujos con Melicotó, se sumó al proyecto  y juntos fueron creando personajes. Después completaría el equipo el diseñador Xavi Vila. La búsqueda le llevó a descubrir elementos mitológicos como las iaies blanques de Formentera, unos espectros de la noche, o los barruguets, seres pequeños y diabólicos que viven en las casas pitiusas.

El funcionamiento del juego es sencillo: los jugadores tendrán que mover sus fichas por el tablero y, dependiendo de donde caiga, podrán coger cartas para mejorar su ejército con el fin de acabar con los seres malignos y recuperar el pergamino mágico que restaurará la paz. «La idea, ahora, es que personas muy jugadoras y otras que no lo sean nada prueben la dinámica del juego para mejorarlo y cerrarlo con el deseo de que el 1 de marzo, Día de les Illes Balears, podamos lanzar el crowdfunding en la plataforma Verkami para poder financiar y comercializar el juego, que costará unos 25 euros», comenta Perelló. Estará catalán y castellano, pero también prevén que hay un QR con las instrucciones en otras lenguas. Perelló tiene muy claro que el juego se podrá usar en los colegios.