Juan Moll ha ofrecido una conferencia en Inca sobre las cualidades imprescindibles para ser un excelente anfitrión
Juan Moll explicó la experiencia vital que fue trabajar con el prestigioso chef francés Joël Robuchon, cuya imagen proyectó junto a un mapa de los 33 lugares del planeta donde abrieron restaurantes. | M. À. Cañellas
Solo tenemos una oportunidad para causar una buena primera impresión, que es la que cuenta. Esta premisa, enfocada a la atención a la clientela en un restaurante, es uno de los muchos consejos que Juan Moll ha compartido este lunes en el Teatre Principal d'Inca con el público. Considerado como el mejor jefe de sala del mundo, el conferenciante ha desgranado en su charla motivacional «El poder de la sonrisa» la importancia de una buena actitud y una motivación constante a la hora de atender a los comensales en un restaurante o negocio de hostelería.
El presidente de Pimem - Restauración, César Amable, ha sido el encargado de introducir la figura de Juan Moll. Ha explicado cómo sus orígenes marcaron su brillante carrera profesional al haber nacido en el seno de una familia que regentaba el restaurante La Sort, en Moreira (Alicante), una vocación que fue puliendo con la formación continuada, estudiando todo sobre el complejo oficio de dirigir una sala, aprendiendo idiomas y haciendo gala de un don de gentes innato y de una cualidad imprescindible para alcanzar la excelencia: la curiosidad por los clientes de cada rincón del planeta donde ha trabajado, sus costumbres, sus idiomas, lo que comen y lo que beben.
Como ha explicado durante la charla el propio Moll, el destino cruzaría su camino con Joël Robuchon, cocinero francés de fama internacional y el chef con más estrellas Michelin de la historia, fallecido en 2018. «Él venía muy asiduamente al restaurante de mi familia cuando veraneaba en España, y siempre se fijaba mucho en mi trabajo; yo tenía solo 23 años cuando me propuso irme con él a cumplir su sueño de abrir restaurantes por todo el mundo». Moll aceptó el reto y juntos abrieron 33 restaurantes de alta gastronomía en todo el mundo, desde Las Vegas a Taipéi.
Este lunes, Juan Moll ha puesto la experiencia adquirida durante sus vivencias en un oficio tan sacrificado como es la restauración, con consejos como como «el entusiasmo es contagioso», «la confianza en uno mismo es la base de todo», «no hay que llevarse los problemas de casa al trabajo ni del trabajo a casa» o la importancia de «poner en valor los recursos humanos de tu negocio» y «no hablar de política, fútbol o religión durante el servicio», entre muchos otros tips prácticos.
La conferencia forma parte del programa previo a los Premis Gastronòmics que organizan por segundo año consecutivo Pimem, Radio Mallorca Cadena Ser y el diario Ultima Hora. Al acto han acudido el alcalde de Inca, Virgilio Moreno; el presidente de Pimem, Jordi Mora; la presidenta del Grupo Serra, Carme Serra; el delegado territorial de Prisa Media en Balears, Josep Roquer; el presidente de Restauración CAEB, Alfonso Robledo; el cocinero y asesor Koldo Royo y el empresario Juan Cabrera, entre muchos otros que se han acercado hasta el Teatre Principal d'Inca para la ocasión.
Esto, que se lo cuente a directores de hotel y hoteleros que tienen a un maitre y dos ayudantes de camarero para dar los servicios de desayuno y cena para 300 personas en hoteles de cuatro estrellas...
2 comentarios
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Me va agradar molt. Va dir ses coses ben clares.
Esto, que se lo cuente a directores de hotel y hoteleros que tienen a un maitre y dos ayudantes de camarero para dar los servicios de desayuno y cena para 300 personas en hoteles de cuatro estrellas...