El Argyll, uno de los veleros más hermosos de la regata. | Redacción Local

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La bahía de Palma acoge un año más en el Club de Mar la regata Illes Balears Classics, que en su 29 edición bate un récord de participación con 40 barcos inscritos. Entre ellos auténticas joyas de época, junto a clásicos y otros embarcaciones de relieve, cuya presencia realza la más importante cita en el calendario para esta modalidad en nuestras aguas. Y se da la circunstancia de que este año coinciden veleros proyectados por la misma firma con décadas de diferencia, lo que permite admirar la evolución en el diseño náutico a través del tiempo.

Entre los barcos participantes se encuentra el Argyll, que ayer recibió el gallardete de la Real Asamblea Española de Capitanes de Yate de manos de su delegado Jesús Coll. Se trata de un precioso velero proyectado por la firma Sparkman & Stephens, construido en 1948 en los astilleros Simms Brothers de Massachusetts (EEUU). Clasificado como Vintage Marconi, mide 17,5 metros de manga y alcanza los 12 nudos de velocidad.

Otro barco singular y que participa en casa es el Calima. Capitaneado por Pachi Rivero, que debuta con él y en cuyo palmarés figuran dos vueltas al mundo y la Copa América. Participa en la clase Espíritu de Tradición y fue construido en 1971 a partir también de un proyecto de Sparkman & Stephen, en este caso a cargo de los legendarios Astilleros Carabela de Barcelona. Durante más de dos décadas aquellas gradas construyeron más de un centenar de embarcaciones de madera, destacando por su ligereza y resistencia. Entre las innovaciones introducidas, fueron pioneros en el sistema laminado con resina epoxi y la construcción invertida. En su primera época y con su anterior armador, Javier Pujol, obtuvo la victoria en regatas de la talla de la Copa del Rey de Clásicos de Maó, la Giraglia o la Fastnet, siendo considerado el más destacado de la flota española en su clase.

Otro barco proyectado por Sparkman & Stephens es el Baruna de 1938 que vuelve a izar velas tras ocho largos años de restauración. La nota tradicional de Mallorca, y que participa como monumento flotante a la historia marítima de las Islas y en recuerdo a nuestros mestres d’aixa, viene representada por la barca de bou Balear de 1924 y que este año celebra su centenario.