El flamenco de Kiko Veneno llega a Calvià. | Redacción Cultura
En 1975 Kiko Veneno y los hermanos Raimundo y Rafael Amador fundaban Veneno, uno de los proyectos más dotados del Nuevo Flamenco.
Un estilo que cruzaba el sentir del flamenco con la impronta del rock sin perder su regusto sureño ancestral.
Tras su disolución en 1978, Kiko Veneno (Figueres, 1952) ha desplegado su seducción en un puñado de discos que destacan sus formas trovadorescas, en los que la música es casi una excusa para articular unos textos repletos de personajes fascinantes, casi siempre a merced de la realidad.
Con su voz raspada, su elegancia y la precisión de un maestro renacentista, Kiko forja canciones que se defienden solas, como las de Sombrero roto (2019), álbum que presentará este domingo en Calvià.