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La progresiva aplicación de la reforma educativa de LOMLOE afecta las escoletas al definirlas como centros de Educación Infantil. Ello implica que las administraciones públicas –y en Balears corresponde en primer lugar al Govern a través de la Conselleria d’Educació– han de garantizar unas condiciones óptimas. De ahí que se exijan unas aulas dimensionadas para asegurar espacios adecuados que eviten aglomeraciones y la separación por edades. Uno de los efectos de esta reforma consiste en que las nuevas escoletas que se construyan a partir de ahora en Baleares dejarán de estar gestionadas por los ayuntamientos y pasarán a manos del Govern, que hoy solo tiene cuatro a su cargo: Verge de la Salut en Palma, Magdalena Humbert en Maó, Francesc de B. Moll en Ciutadella y Can Nebot en Eivissa. La medida ha de mejorar las condiciones laborales de los profesionales, que también deberán acreditar su preparación.

Gratuidad de la etapa 0-3 años.

La gratuidad de la etapa 0-3 años, una de las iniciativas estrella del Govern Prohens, beneficiará a 6.079 familias más en Balears, pasando de las actuales 4.349 a 10.428. En la actualidad, el Archipiélago cuenta con 191 centros de Educación Infantil, de los que 107 pertenecen a la red pública y 84 a la complementaria. El coste de la gratuidad hasta el año 2027 ascenderá a 152,6 millones de euros, con una previsión de 39,7 para el próximo curso 2024-2025.

Conciertos educativos con cada centro.

Esta medida, financiada con fondos propios de la comunidad, cubre cuatro horas lectivas diarias durante diez meses al año. Los recursos que obtenga el Govern de los fondos europeos se destinarán a la creación de nuevas plazas, que debe constituir un objetivo prioritario. La gratuidad en las escoletas de Baleares se concretará mediante conciertos educativos con cada centro, que han de implicar un mayor control fiscal y transparencia en su gestión.