Este robot minero (de datos), con el cuello torcido por deformación profesional y una pierna muy maltrecha a resultas de antiguas batallas cibernéticas que le provocaba cierta cojera, guardaba en un compartimento secreto de la barriga un ejemplar del libro Fábulas de robots de Stanislaw Lem, a fin de conocerse a sí mismo, consultarlo cuando olvidaba quién era, y etcétera, etcétera. En realidad no le hacía ninguna falta, porque se lo sabía de memoria, y su lectura tampoco le sacaba de dudas. Aun así, le habría gustado tener ese libro en la mesilla de noche, salvo que los robots, queridos niños y niñas, carecen de mesillas de noche. Y más éste, que ya estaba en las últimas y era un robot zombi. Mal programado de fábrica, con problemas de identidad y majareta por defecto, desprogramado y vuelto a programar chapuceramente, hackeado luego por rivales tecnológicos y finalmente poseído por un software maligno que le sorbió el seso y le convirtió en zombi, la verdad es que no tenía remedio. Y como no tenía remedio, permanecía quieto en un rincón, con el cuello torcido y leyendo Fábulas de robots para saber a qué atenerse. Nunca lo consiguió. ¡Un robot zombi! Eso sí que es pasarse de rosca, exagerar la exageración. Exceder lo excesivo, multiplicar lo imposible por dos. Matemáticas, en definitiva. Y todos los días matemáticamente, de lunes a viernes, a las 9:30 hora local y coincidiendo con la apertura de la Bolsa de Nueva York, este robot zombi se activaba presa de súbito apetito financiero insaciable, abandonaba su rincón cojeando, y se entregaba a Dios sabe qué oscuras depravaciones bursátiles. Por la tarde no recordaba nada, le salía líquido lubricante de la nariz, estaba exhausto y su programa de autorreparación no daba abasto. Qué he hecho, joder, qué he hecho, murmuraba espantado. Por la noche, el robot que leía fábulas de robots sacaba su libro de la barriga y se enfrascaba en la lectura, para conocerse a sí mismo y forjarse una personalidad estable.
Fábula del robot zombi
Palma01/11/21 3:59
También en Opinión
- ¿Por qué aumentan los casos de cáncer?
- Una muchedumbre golpea a un vigilante de Son Espases e intenta agredir a los médicos por la muerte de un bebé
- Fallece una niña de 12 años tras precipitarse desde la séptima planta de un hotel en Alcúdia
- «La presión del nacionalismo lingüístico lleva a muchas familias de Baleares a renunciar a la lengua materna de sus hijos»
- Contramanifestación encubierta: Pegatinas a favor de los turistas sobre los carteles contra la masificación
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.