Renovarse o morir, sentencia uno de nuestros refranes más reiterados, y como si algo sobra aquí es sol y viento, y la base de la cultura nacional es el refranero (un grumo de refranes entrelazados de más de doscientos kilos de peso), no es raro que en plena crisis energética global, España y Portugal (la excepción ibérica) lideren el auge de las renovables a base de aerogeneradores y paneles solares. Con los que además proyectamos fabricar hidrógeno verde (harán falta más paneles) para exportar a Europa, más sombría y con menos ventoleras. Menos energética, en fin. Pronto habrá paneles en la vía pública, sustituyendo las plazas de aparcamiento en calles y plazas, y es posible que la burbuja renovable obligue a colocar pequeños aerogeneradores portátiles en las macetas del balcón, porque naturalmente, sacar beneficio energético al sol que nos achicharra siete meses al año, y al viento que sopla tanto a la intemperie como en el interior de las cabezas emprendedoras, es una ocasión que no se puede desperdiciar. ¡Lo que nos ha jodido toda la vida, ahora nos bendice!, aseguran admirados los más entusiastas.
Renovables
Palma25/05/23 0:29
También en Opinión
- Los conductores de la EMT, ante otro año de gratuidad: «No podemos continuar así»
- Ni 18 ni 23 grados: esta es la temperatura recomendada a la que poner el radiador
- Madrugada bajo cero y con heladas en diferentes puntos de Mallorca
- Un excursionista, herido grave al caer desde unos 20 metros en Llucmajor
- La desconocida razón por la que se celebra el segundo día de Navidad en Mallorca
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.