Gran parte de los problemas que asolan al planeta se deben a la democracia. Es duro, pero real. Mientras el mundo estuvo tiránicamente dirigido por cuatro gatos acaudalados que sometían a millones de desarrapados, la naturaleza funcionaba de maravilla, el paisaje idílico permanecía intacto y todo, de alguna manera, estaba en su sitio. La Tierra ha permanecido así durante milenios, una situación justa para el medio ambiente pero terriblemente injusta para el ser humano. Los problemas ecológicos llegaron con la revolución industrial, con el desarrollo del mundo obrero y, aunque parezca controvertido, con el avance de las democracias. Millones de personas abandonaron la pobreza extrema y tuvieron la oportunidad de disfrutar, aunque sea poquito y de forma modesta, de los «lujos» antaño reservados a la aristocracia. Nosotros, los obreros, hemos alcanzado cierto nivel de confort en nuestra vivienda, la mayoría tiene coche, muchos viajamos, cambiamos de ropa y calzado a menudo, generamos toneladas de basura, consumimos ingentes cantidades de electricidad, gas y agua. Nosotros somos el problema. Porque somos muchísimos. Por eso encuentro poco eficaz y también ciertamente revanchista la idea de Jets and yachts, the party is over, la campaña contra la presencia de jets privados y yates de lujo que han emprendido algunos activistas en Ibiza. ¿Qué realmente les molesta de ellos? Que son ricos, está claro. Porque por supuesto que contaminan y derrochan, pero infinitamente menos que nosotros, la masa de clase trabajadora que jamás subiremos a un jet ni a un súperyate. Únicamente por una cuestión numérica, pero determinante. La naturaleza peligra por nosotros, que somos una auténtica plaga.
The party is over
Palma17/07/23 0:29
También en Opinión
- Noche trágica en las carreteras de Mallorca: cinco accidentes se saldan con dos fallecidos, dos heridos graves y cuatro leves
- El Gobierno prorrogará finalmente todo el año la gratuidad del transporte en Baleares
- El colectivo de propietarios alemanes de Santa Ponça, desesperado: «Las obras arruinan nuestro negocio»
- Detenidos tres trabajadores de las obras del aeropuerto de Palma por robar toneladas de material
- Pez globo en Baleares: ¿Una amenaza real?
2 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Totalmente de acuerdo. Son unos descerebrados perfectamente identificables y que deberían pagar económicamente y con prisión sus tropelías. Protesta todo lo que quieras pero respetando a los demás y a la propiedad privada.
Normalment estic d'acord amb vostè però avui no és el cas. Miri quant contamina un jet privat o un iot i probablement canviï d'opinió. La classe obrera té dret a consumir, dir que els rics han de tenir dret a contaminar més que els demés és classisme. Això sí, està clar que som molts i que el consumisme capitalista és el culpable perquè som molts, per això, lo més ecològic és no tenir fills