El Gobierno, de acuerdo con las exigencias del proscrito Puigdemont, está pergeñando una ley de amnistía que supervisa el TC, transformado en una extensión del PSOE, a las órdenes de un peón sumiso al autócrata. Está dispuesto a despreciar el Derecho, humillar al Estado y desautorizar a la Justicia, o sea, a crear una nueva legalidad al dictado de sus intereses, un proyecto iliberal y demoledor de la democracia y de España. No dudarán en enfangar sus togas en el lodo de la ignominia tanto como sea necesario con tal de superar los obstáculos previstos en la Constitución. De llevarse a cabo, constituirá un acontecimiento cuyos efectos modificarán el sentido histórico y político de España.
Que la amnistía es inconstitucional lo aprenden los estudiantes de Derecho en el primer curso. Si la Constitución veta los indultos generales, se infiere lo de que quien no puede lo menos no puede lo más. Tanto es así que, hasta ahora, en el PSOE se ha mantenido este criterio de forma unánime, lo que evidencia la implacable videoteca. Sánchez, en 2022, se comprometió a no aceptar la amnistía porque una figura jurídica semejante no tendría cabida en la Constitución. También prometió traer al golpista para sentarlo en el banquillo y, sin embargo, ahora le extiende la alfombra roja. Hoy, todos aquellos que con tanta firmeza afirmaban su inconstitucionalidad, todos, al unísono, quiebran su palabra sin el menor pudor porque necesitan de los votos de Puchi para mantenerse en el poder.
Vienen alzándose voces advirtiendo de la gravedad de la situación que amenaza nuestro proyecto de convivencia debido a un proceso solapado de deconstrucción del sistema del 78, y los ciudadanos no podemos permanecer pasivos cuando está en juego nuestro destino. No podemos seguir quejándonos sin pensar qué podemos hacer.
Para evitar la hecatombe, Feijóo podría ceder la gobernabilidad a Sánchez con un acuerdo de legislatura; los gobiernos autonómicos y los ayuntamientos que tengan mayoría para hacerlo podrían firmar un manifiesto que ponga en evidencia la gravedad del momento; miles de personas de los diferentes partidos constitucionales se podrían declarar en huelga de hambre en todas las autonomías.
Todo menos quedarse en casa.
8 comentarios
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AngelcaídoLo de cambiar el sentido histórico (que no sé ni exactamente qué quiere decir) está en el artículo de su admirado Delgado. Pregúntele a él...
ClintdimaVaya hombre que FINA la piel para unas cosas y que gruesa para otras como CALLAR ANTE LA CONTRATACIÓN DE 20 EXPERTOS que llevan semanas RETORCIENDO la CONSTITUCIÓN para que encajar LA AMNISTÍA PARA PAGAR VOTOS... En fin.. Y NO. La amnistía económica fue para que los huidos de TRIBUTAR volvieran a hacerlo en España.... No trate de confundir a las personas con esto que queda muy en evidencia .
Caramba!!!!! Sólo le ha faltado decir que el pueblo se "arme" y fuerce al gobierno a salir por piernas, aunque esto ya lo dejó ir ayer el genocida Aznar. Cálmense señores, a día de hoy, el Gobierno no ha dicho ni mú sobre amnistía sólo ha dicho que todo tiene que estar justificado dentro de la sacrosanta Constitución. La última amnistía que hubo en España la promulgó el PP y fué "económica" para beneficiar a muchos de sus congéneres.
Jaume PataumeCambiar el sentido histórico de España? Oiga que eso lo debe decidír el PUEBLO ESPAÑOL y nunca un gobierno que NUNCA SE HA CARACTERIZADO POR GOBERNAR PARA TODOS. No el camino que usted propone no es el correcto.
JahovalDemocracia NO ES CAMBIAR AMNISTÍA POR VOTOS. Eso es un PASTELEO que hunde a la Democracia.
La izquierda tiene a los sindicatos que SIEMPRE LE HA ORGANIZADO LAS MANIFESTACIONES A SU INTERÉS La DERECHA carece de este medio y necesita con URGENCIA que alguien organice y haga público las CITAS EN QUE EL CIUDADANO SE PODRÁ MANIFESTAR PÚBLICAMENTE CONTRA LA TENTATIVA DE AMNISTÍA POR VOTOS. BASTA YA!!!
los ciudadanos ya nos hemos pronunciado sin huelgas de hambre: hemos votado y hemos constituido un congreso de los diputados. Corresponde a los políticos elegidos conformar un gobierno. ESO ES LA DEMORACIA. Si no son capaces deberían dimitir en bloque y dejar que otros sean capaces de entenderse. Si fueran necesarias nuevas elecciones y no pudiera presentarse ningún electo de las primeras seguro que se formaría gobierno a la primera
Por un momento, cuando habla de ensuciar la toga en la ignomínia del lodo, pensé que hablaba de la absolución de Podemos del Caso Neurona (como en todos los demás)... Modificar el sentido histórico y político de España es precisamente lo que viene haciendo falta, pero no por una amnistía sino por una revisión territorial que no sea centralista. Hasta los mismísimos de que Madrid dicte lo que es o deja de ser España.