Crónica Negra, con Julio Bastida y Javier Jiménez | Silvia Díaz

El 8 de enero de 2001, una joven de 29 años llamada Ana Torres Marqueño sufrió quemaduras en el 95 por ciento de su cuerpo, tras ser rociada con cola altamente inflamable en Palma. La policía detuvo a su novio, un marroquí llamado Mohamed Abdeoaim, que siempre sostuvo que se había tratado de un fatídico accidente. Sin embargo, la investigación demostró que mentía y un jurado lo condenó a 22 años de cárcel. El Grupo de Homicidios concluyó que el magrebí la atacó porque Ana quería romper con él.

El crimen de Ana Torres