Ocultos en un camión, dos menores alemanes de 13 años decidieron
vivir una aventura que a buen seguro no olvidarán. Cruzaron de
incógnito Europa y en España se apearon en Barcelona. De allí, en
barco, llegaron a Mallorca, en donde han malvivido hasta ahora, que
han sido detenidos por robar en un bar.
La llegada a la Isla de los dos adolescentes no se ha precisado
desde la Jefatura de Policía de Palma, pero se estima que llevaban
varios días deambulando por s'Arenal y cala Estancia. Dormían en la
playa o en locales abandonados y parece ser que habían llegado sin
recursos económicos. En su país, sus respectivas familias habían
interpuesto denuncia por la doble desaparición y la Interpol
buscaba a los dos muchachos.
El pasado jueves día 8 los dos extranjeros tenían hambre y,
sobre todo, ganas de fumar. Repararon en una marisquería de cala
Estancia y decidieron entrar a robar de noche, forzando una plancha
adosada a una pared. En aquella ocasión sustrajeron paquetes de
tabaco y alimentos, que les duró dos días. El sábado decidieron
volver al establecimiento, en esta ocasión a las nueve de la
mañana. Se desconoce exactamente si sustrajeron algo, pero horas
después un camarero sospechó de ellos. Habían dejado una caja de
puros y un libro en alemán y el trabajador cayó en la cuenta de que
los dos niños pululaban a menudo por el local.
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