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La Audiencia de Palma ha condenado a tres años y seis meses de cárcel a un hombre de 67 años de edad, llamado Juan Vicens Gomila, que abusó de una menor, que sufre una deficiencia mental. El acusado, vecino de Petra, ha sido declarado culpable de un delito continuado de abusos sexuales.

La sentencia fija el inicio de los hechos en el periodo del verano de 1996. Juan Vicens mantenía una amistad desde hacía varios años con una menor, que en aquellas fechas contaba con once años de edad. El acusado invitaba a la víctima a que acudiera a una caseta de campo de su propiedad, cuyo lugar no especifica la sentencia. Era en este lugar donde el agresor sexual convencía a la niña para que se desnudara. Cuando lo conseguía, él hacia lo mismo. Una vez desnudos los dos, el acusado sometía a la niña a todo tipo de tocamientos por todo el cuerpo. El tribunal afirma que el sexagenario lograba que la menor le tocara el pene y después le masturbaba.

Estas agresiones sexuales no sólo se desarrollaron durante el citado verano, sino que continuaron en los meses siguientes. Así, la sentencia explica que la frecuencia de estos contactos aumentó durante el verano del año siguiente, cuando la menor ya contaba con doce años de edad. El tribunal califica de «elevadísimo» el número de veces que el acusado se aprovechaba de la víctima, que lograba convencerla para que se dejara someter a todo tipo de tocamientos.

La sentencia se refiere a las dos ocasiones en las que la menor, una vez sometida a la fase de tocamientos, fue convencida para realizar una felación al acusado.