Dos trabajadoras del Hospital General de Palma sufrieron ayer
quemaduras, de poca importancia, al producirse una deflagración de
gas en la cocina del centro hospitalario. De momento se desconocen
las causas de este siniestro, pero se cree que pudo ser por un
error al abrir una llave de paso.
El suceso ocurrió poco antes de las ocho de la mañana. Las dos
cocineras encendieron uno de los fogones para calentar el café. Una
de las trabajadoras había notado un fuerte olor a gas. Sin embargo,
no se tuvo en cuenta, porque, al encender uno de los fogones, se
produjo una deflagración, que alcanzó a las dos trabajadoras de la
cocina. Una de ellas resultó herida en un brazo, mientras que su
compañera sufrió quemaduras en la cara.
Lluís Coll, gerente de Gesma, explicó ayer que tras el suceso se
movilizó todo el personal de seguridad del hospital. Un celador fue
quien logró sofocar el pequeño incendio de la cocina, utilizando
para ello un extintor. El fuego no ocasionó daños materiales en la
cocina. El celador también resultó intoxicado por el humo cuando
intentaba apagar el fuego. Los tres trabajadores del hospital
fueron evacuados hasta la Mutua Balear. Se trata de B.G.G., E.T.M.
y A.G.S. En el centro médico les sometieron a una serie de curas
por las quemaduras que presentaban. Después, los tres fueron dados
de alta.
El responsable sanitario explicó que desconocía las causas
exactas que habían motivado este suceso. Lluís Coll mantuvo ayer
entrevistas con el ingeniero y con el técnico de GESA para valorar
lo ocurrido y determinar la causa de la deflagración. Los técnicos,
a falta del informe definitivo, consideraron que el incidente no
tenía relación con el estado de la cocina, que había superado todas
las revisiones, la última de ellas el pasado mes de febrero.
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