Los hermanos Orta Gámez dispararon contra su coche para tener una coartada

El suceso ocurrió en un cruce de las afueras de Manacor. Según el juez, los hermanos Orta Gámez se encontraron con cuatro miembros de una familia rival, los Santiago Heredia, y desde su coche realizaron varios disparos contra el otro vehículo. En el tiroteo resultaron heridas dos de las cuatro personas. Una de ellas fue alcanzada en la mano, y la otra resultó herido en la cabeza.

Los abogados defensores Eduardo Valdivia y Fernando Mateas pidieron ayer al tribunal de la Audiencia que ponga en libertad a los dos detenidos. Ambos letrados afirman que no se ha demostrado que existiera intención de matar, pese a que los dos hermanos utilizaran una pistola. Uno de los abogados recordó que los Orta Gámez se habían entregado voluntariamente ante el juez, pero que lo hicieron después de que se encargaran de poner a salvo a sus familias, que también fueron amenazadas. Los letrados niegan que la alarma social justifique que los dos familiares estén en prisión.

El fiscal Pedro Horrach, que pide que se confirme el auto de procesamiento, criticó a las defensas por afirmar que nunca existió intención de matar, sino sólo de lesionar. «Cuando una persona te dispara con una pistola desde más de diez metros lo único que pretende es matarte, no lesionarte», afirmó el fiscal, que pidió al tribunal que mantenga la situación de prisión «por la peligrosidad criminal de los acusados».

Los abogados Gaspar Oliver y Juan Carlos Peiró, que representan la acusación particular en nombre de las personas tiroteadas, recordaron la alarma social que ha supuesto en la localidad de Manacor este tiroteo. Oliver afirmó que la posibilidad de legítima defensa que plantean los dos procesados, al decir que cayeron en una emboscada, queda descartada.