Los seis detenidos en la operación policial contra el clan de «El
Pablo» tienen que declarar hoy ante el juez. Dos de ellos, la madre
y un sobrino del narcotraficante de la Soledat, fueron puestos ayer
en libertad por el Grupo II de Estupefacientes al no tenerse
pruebas muy concretas sobre su participación en los hechos, pero
siguen como acusados en las diligencias.
Además de los dos kilos de cocaína se han intervenido más de
cien mil pesetas en efectivo y dos balanzas de precisión, como
resultado de los registros efectuados en dos viviendas de la
Soledat y en un apartamento de Cala Major. Los dos colombianos
detenidos, Alirio A.C., de 33 años y William G., de 21, ya eran
investigados desde hace meses y, además de las sospechas de que son
dos sicarios del 'cártel de Medellín', se les relacionó con un clan
de narcotraficantes argentinos. De las investigaciones policiales
efectuadas se deduce que, ante la ausencia de Pablo Campos, huido
de la Justicia desde hace dos años, el clan estaba ahora dirigido
por su hermana, Tamara, que fue detenida el pasado martes y en cuya
casa se efectuó la transacción del alijo.
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