TW
0
J.MASCARELL La empresa que explota el Cappuccino, que dirige el empresario Juan Picornell, ha despedido al hermano del trabajador que el pasado año murió en la explosión ocurrida en el local del Passeig Marítim. Pese a que el trabajador se encuentra de baja por depresión por la muerte de su hermano, para justificar el despedido la empresa alega «una disminución progresiva del rendimiento en el trabajo», según señala un documento firmado por el citado empresario que está en poder de este periódico.

El documento esta fechado el 8 de noviembre de 1999, y señala que la empresa pone a disposición del trabajador 122.711 pesetas en concepto de liquidación, saldo y finiquito. Antonio Javier Córdoba Maldonado, el trabajador despedido, no está dispuesto a aceptar esta decisión de la empresa. El joven, asesorado por el sindicato UGT, ha presentado una demanda de concilización contra la empresa. El trabajador se encuentra en situación de incapacidad temporal desde el día 27 de septiembre de 1998. El motivo de esta baja médica es porque sufre un trastorno por estrés postraumático, con síntomas de depresión, somatizaciones, alteraciones instinto-negativas, conductas evitativas e ideas de muerte.

Esta situación es consecuencia de la muerte de su hermano. El sindicato, que solicita que este despedido sea declarado nulo, considera que la decisión de la empresa responde a objetivos «discriminatorios y de represalia». Esta decisión de despedir al trabajador coincide casi en las fechas con la decisión del juez de aceptar a trámite una querella que han presentado los padres del camarero muerto contra el empresario Juan Picornell, a quien acusan de un delito contra los derechos de los trabajadores.