Durante el siniestro se vieron escenas de pánico y tensión entre los vecinos del edificio. Foto: SEBASTIÀ AMENGUAL

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Un perro salvó la vida a cuatro personas que estaban durmiendo cuando se declaró un incendio en una vivienda, en es Coll den Rabassa. El animal se puso a ladrar hasta que despertó a una niña, y después falleció a causa de la inhalación de humo. Los hechos se iniciaron pocos minutos después de las cuatro de la madrugada de ayer, en el segundo piso del edificio de seis plantas situado en el número 84 de la calle Cardenal Rossell.

Se supone, anque es un dato sin confirmar oficialmente, que a causa de una estufa eléctrica que estaba junto a un sofá, se inició un fuego en el interior de la vivienda. En las habitaciones estaban durmiendo cuatro personas: Virtudes Martín García, de 80 años; los hermanos María Victoria y Javier González Rodríguez, de 12 y 16 años de edad respectivamente (nietos de Virtudes) y Josefina, de 16 años de edad y amiga de la familia. Cuando despertaron, las llamas invadían ya buena parte de la vivienda, que no pudieron abandonar debido a que estaba bloqueada por el fuego la puerta de entrada.

El 092 recibió una llamada de auxilio y se desplazaron al lugar unidades de la Policía Local, del Cuerpo Nacional de Policía, cuatro ambulancias del 061 y el Cos de Bombers. Los vecinos de los pisos superiores quedaron también bloqueados a causa del fuego y el humo, mientras que los del primer piso pudieron salir a la calle. Para rescatar a las cuatro personas de la casa en llamas, los policías y bomberos accedieron al patio del primer piso, desde donde colocaron una escalera con la que se accedió a una ventana de la casa siniestrada, y se rescató a los ocupantes.