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Cinco turistas, todos ellos de nacionalidad alemana, tuvieron que ser rescatados el pasado domingo al quedar a la deriva en aguas de Cala Murada, en la localidad de Manacor. El incidente, en el que por fortuna no hubo heridos, ocurrió sobre las 5.30 horas. En ese momento se localizó a lo lejos a un catamarán que se encontraba a la deriva a unas dos millas de la costa. A bordo se encontraban un hombre y su hijo. Inmediatamente se movilizó la Policía Local de Manacor y la Guardia Civil, así como Salvamento Marítimo. Cuando la embarcación de ayuda llegó hasta el lugar donde se encontraba el catamarán se descubrió que ya había salido en su ayuda una zodiac neumática, que se mostró dispuesta a trasladar a la otra embarcación hasta la orilla. Las dos personas que iban dentro del catamarán, un hombre de 59 años y su hijo de 17, estaban agotados y señalaron que se había adentrado en el mar pero que no habían podido volver a atrás debido al mal tiempo que había en aquellos momentos. Mientras se atendía a los ocupantes del velero se descubrió que no muy lejos de allí se encontraba una embarcación neumática a la deriva. Se trataba de una zodiac, en la que navegaban tres tripulantes de nacionalidad alemana, todos ellos adultos. Una embarcación de salvamento acudió en su ayuda cuando la zodiac ya se encontraba a más de dos millas de distancia de la costa.