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El Grupo de Homicidios del Cuerpo Nacional de Policía ha tomado declaración, en calidad de imputado, al auxiliar de la empresa de seguridad encargada de la vigilancia en el pabellón que se incendió hace tres semanas. En las diferentes manifestaciones que el joven efectuó sobre el siniestro entró en varias contradicciones y se ha confirmado que algunas de sus declaraciones no son ciertas. La más flagrante es la de la presencia de una pareja en el interior del pabellón, que habría estado haciendo el acto sexual y se dedujo que el fuego pudo haberse originado en una colilla que arrojaron al suelo.

Esta versión ya fue puesta en serias dudas por el Cos de Bombers y, de manera definitiva, Homicidios ha confirmado que los que estuvieron en el interior del recinto, sin poder determinarse la hora, fueron dos niños de entre once y doce años que dieron saltos en la cama elástica. Por lo tanto se descartan las hipótesis del cigarrillo y del acto sexual. Al respecto, Joana Maria Petrus, directora general d'Esports, cree que se trataba de dos niños que acudieron a las instalaciones del Príncipes de España a practicar algún deporte y, de paso, no pudieron resistirse a la tentación de dar unos saltos en la cama elástica.

En definitiva, la policía ha localizado a los dos niños y se descarta cualquier posible relación con el siniestro. La declaración ante el Grupo de Homicidios del auxiliar de la empresa de seguridad, al que no se le ha renovado contrato después de lo ocurrido, se efectuó con la presencia de un abogado. Por el momento al joven se le podría imputar la dejadez en sus funciones y omisión de sus funciones en las labores de vigilancia.