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MIGUEL BLUM, ENVIADO ESPECIAL La familia Del Salto se mostró ayer como una auténtica piña al estar presente en el juicio contra la persona que supuestamente asesinó a María del Carmen. La madre de la joven de Porto Cristo tuvo que realizar un gran esfuerzo para controlarse al ver de cerca a la persona que, según cree, terminó con la vida de su hija. «Con la mirada le hubiera matado», señaló la madre, aunque aclaró que tanto Okulus como el abogado que le defiende «evitaron mirarme».

El aspecto que mostró ayer el bombero alemán es muy diferente a las imágenes del día de su detención. Ayer parecía mucho más delgado. Apareció ante el tribunal vestido con un traje negro, del mismo color que la corbata, y una camisa blanca, además de una poblada barba. A la familia Del Salto, el acusado les pareció «muy frío». A Gracia Fajardo no le pasó por alto este cambio de imagen. «Si ha perdido peso es porque ha sufrido por lo que ha hecho, y ello me llena», indicó la madre, que insistió en que ella está convencida de que «Okulus ha matado a mi hija. Ha matado un trozo de mi vida, una parte de mi corazón....».

Mónica del Salto, la hermana de María del Carmen, se mostró ayer «aliviada de que haya empezado el juicio. Ahora se verá si la justicia alemana es más fuerte que la española». La familia escuchó con especial interés cuando la fiscal Krämer leyó la acusación que sostiene contra Okulus. La Fiscalía de Hamburgo acusa al bombero germano, además del asesinato de María del Carmen, de otra violación cometida en Mallorca antes de la muerte de joven de Porto Cristo. En concreto se le acusa de abusar de una joven alemana de 17 años que se encontraba de vacaciones en Mallorca.