Una conocida discoteca del Passeig Marítim de Palma fue escenario,
el sábado por la noche, de un conato de incendio que obligó a
desalojar a cerca de 250 jóvenes que disfrutaban de una gala
juvenil. Una densa capa de humo fue detectada por el personal del
establecimiento y por los clientes a eso de la 22'30 horas,
coincidiendo con la finalización de la gala. La humareda se
extendió con rapidez por las instalaciones, pero el desalojo de la
sala se llevó a cabo de forma ordenada y nadie resultó herido.
El Cos de Bombers de Palma envió al Passeig Marítim a dos
unidades procedentes del parque de sa Teulera y del Central,
mientras que la Policía Local y varias ambulancias hacían lo
propio. Los funcionarios confirmaron que el humo procedía del aire
acondicionado y que se había iniciado por un pequeño fuego en el
conducto de entrada. A partir de la exploración preliminar que
realizaron llegaron a la conclusión de que una persona desconocida
había arrojado una colilla por la trampilla del sistema que
comunica con el exterior.
Esta circunstancia, unida a la suciedad acumulada en el
conducto, provocó el fuego y la espesa capa de humo. Las tareas de
extinción fueron relativamente sencillas y duraron unos 50 minutos.
El dueño de la discoteca fue informado, tras el susto, de que no
existía ningún inconveniente para cerrar el local a la hora de la
gala de noche aunque eso sí, durante media hora se ventiló el
recinto para evitar problemas en las horas sucesivas. Una joven que
se hallaba en la discoteca y salió apresuradamente al detectar el
humo fue atendida por los servicios sanitarios de un ataque de
nervios, del que se restableció en pocos minutos y no fue necesario
hospitalizarla.
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