Se desploma un edificio de apartamentos del Port de Alcúdia

A la una del mediodía de ayer varias personas de los servicios de limpieza trabajaban en el inmueble cuando oyeron un crujido y notaron un movimiento en el edificio. Inmediatamente abandonaron el lugar para ver desde pocos metros cómo cedía la estructura. En pocos minutos quedó a la vista el interior de uno de los apartamentos ubicado en la primera planta. La pared lateral que cubría el mencionado apartamento quedó totalmente destruida, a la vez que el resto de paredes se agolpaban unas contra otras como un castillo de naipes.

Milagrosamente no hubo que lamentar víctimas pues los ocupantes de los cuatro apartamentos que estaban alquilados se encontraban fuera del lugar. No obstante la policía, bomberos y protección civil intentaron en vano hasta las cinco de la tarde localizar a una turista alemana alojada en la planta baja. Sobre el alcalde, Miquel Ferrer, recaía la responsabilidad de dar la orden de derribo pero no quería dar este paso hasta estar bien seguro de que no quedaba nadie en el interior. A las cinco y cuarto, una vez localizada la inquilina, una grúa con control remoto procedió a tirar las ruinas. Los apartamentos fueron construidos en el año 1987. Su propietario, Vicenç Torrens, se mostraba ayer sorprendido porque no habían aparecido grietas hasta el momento. Los técnicos sospechan que la caída pudo deberse a un corrimiento de tierras que pudo afectar a las paredes de carga que se situan entre los cimientos y el forjado sanitario.