Todos los Ayuntamientos de Catalunya guardaron ayer, a las doce del
mediodía, 5 minutos de silencio como muestra de duelo por los 28
fallecidos por el accidente de tráfico. Numerosas personas se
congregaron espontáneamente ante las puertas de los ayuntamientos,
especialmente en Ripollet y Viladecans, de donde eran las víctimas,
para sumarse a la muestra de dolor.
Tanto la Federación de Municipios de Cataluña como la Asociación
Catalana de Municipios han emitido un comunicado conjunto para
recomendar a los ayuntamientos que durante los tres días de duelo
oficial decretados en Catalunya bajen las banderas en los edificios
municipales y suspendan los actos oficiales programados. Asimismo,
han propuesto que los equipos de gobierno estudien la posibilidad
de aplazar actos festivos en caso de que durante este fin de semana
se celebren en sus pueblos. También han sugerido que envíen cartas
de apoyo, firmadas por los alcaldes, a los máximos mandatarios de
Ripollet y Viladecans. La Diputación de Barcelona también se ha
sumado al duelo oficial y ha anulado todos los actos públicos
previstos hasta el domingo.
Miles de personas con lazos negros recibieron ayer tarde en en
medio de fuertes aplausos al cortejo fúnebre con los féretros de
diez de las 28 víctimas mortales del accidente, que llegó sobre las
18.30 horas de hoy al pabellón municipal de Ripollet, donde se
instaló la capilla ardiente.
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