Un joven nigeriano ha sido detenido en Palma por la Policía Local
acusado de detención ilegal y continuos malos tratos, físicos y
psíquicos a su compañera, de la misma nacionalidad. La víctima, de
poco más de 20 años, ha declarado que el motivo de la última
agresión, ocurrida la noche del pasado sábado en Palma, fue porque
ella se negó a ejercer la prostitución. También ha relatado que el
pasado mes de junio tuvo que recibir asistencia médica a raiz de
una paliza y que los médicos descubrieron que estaba embarazada.
Poco después su compañero la obligó a abortar.
Los hechos que han propiciado la detención se iniciaron la noche
del sábado. La joven estaba con su compañero en un piso donde
residen. Después de cenar, sobre las 21'30 horas, el hombre le dijo
que ya era hora de comenzar el trabajo, refiriéndose a que tenía
que prostituirse en la Porta de Sant Antoni. Pero la chica se negó
argumentando que tenía miedo a ser localizada por la policía,
puesto que no tiene legalizada su residencia en España. El joven
comenzó a golpearla y, para evitar que los vecinos pudieran
escuchar los gritos, subió el volúmen de un aparato de música. En
la casa había una tercera persona, que rehusó ayudar a la chica y
se fue 'de marcha'. Mientras tanto la chica fue golpeada en
distintas partes del cuerpo.
A las siete y media de la mañana, cuando regresó el testigo,
auxilió a la chica y facilitó que formulara la denuncia. La mujer
fue atendida en un centro médico y presentaba contusiones en un
pómulo, labio y espalda, así como importantes lesiones en las manos
y muñecas, donde los médicos apreciaron signos inflamatorios y de
impotencia funcional.
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