El centro de emergencias de las ambulancias del 061, acostumbrado a
efectuar cientos de servicios al día, se convirtió en la tarde de
ayer en protagonista de uno de estos sucesos.
Sobre las siete de la tarde los trabajadores del centro, ubicado
en la calle Fàbrica número 87, en las inmediaciones de sa Feixina,
fueron alertados de que salía humo de las oficinas, en concreto de
la central de teléfonos. El humo, según parece, se propagó por el
conducto del aire acondicionado y los responsables sanitarios
decidieron desalojar las instalaciones ante el temor de un incendio
generalizado. Los trabajadores salieron a la calle y el dispositivo
de emergencia, que esta vez no estaba coordinado por el 061, se
puso en marcha sin demora. Agentes del Cuerpo Nacional de Policía,
Policía Local, Bomberos y cinco dotaciones de Ambulancias Insulares
acudieron con prontitud a la calle Fàbrica.
El fuego no se había extendido, pero el humo inundaba todo el
edificio y fue necesario airearlo. Las llamadas telefónicas al 061
fueron desviadas al centro de emergencias del 112, para que las
urgencias de los ciudadanos con problemas no quedaran
desatendidas.
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