Miguel Ferrá Sastre, un motorista de 56 años de edad, y María Durán
Espinar, una peatón de 70, fallecieron en dos accidentes de tráfico
que se registraron ayer en el polígono de Son Castelló y en
Palma.
El primero de los siniestros ocurrió a las 02.53 horas en la
calle Gremi Sucrers i Candelers, frente al número 16. El motorista
perdió el control por causas desconocidas y se estrelló contra una
señal de tráfico; luego, al caer, se golpeó la cabeza contra el
bordillo, por lo que quedó tendido sobre la calzada en estado
crítico. Las personas que descubrieron al accidentado en el asfalto
dieron aviso inmediato al servicio de emergencias del 061 y a la
Policía Local. Los sanitarios intentaron por todos los medios
reanimar a la víctima, pero a las 03.30 horas comunicaron al
juzgado de guardia que Miguel Ferrá había fallecido. El hombre
pilotaba un ciclomotor marca Honda modelo Bali SJ50, con placas de
matrícula C-BDD, y según la investigación policial en el accidente
no se vio implicado ningún otro vehículo.
A las 09.15 horas la calle Francisco de Sales, en las
proximidades de Capitán Salom, fue el escenario del segundo
siniestro mortal. Una septuagenaria, vecina de Llucmajor, cruzó la
calle a la altura del número 26, sin advertir que en esos momentos
circulaba un turismo. El conductor, un hombre, intentó sin éxito
frenar y la mujer salió despedida a consecuencia del violento
impacto. María Durán quedó en estado crítico, con un traumatismo
craneal y un hematoma en el frontoparietal derecho de pronóstico
muy grave.
Los médicos de Ambulancias Insulares intentaron estabilizar sus
constantes durante más de un cuarto de hora, pero al final
decidieron trasladarla urgentemente hasta Son Dureta porque existía
riesgo de que falleciera sobre la calzada. Horas después, ya
hospitalizada, la vecina de Llucmajor dejó de respirar.
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