La Guardia Civil ha concluido un nuevo servicio contra el tráfico
de drogas que se desarrolla en Mallorca. En esta operación se ha
detenido a cuatro personas y se ha intervenido hachís, cocaína y
éxtasis. Según informaron ayer fuentes de la Comandancia de Palma,
fue a finales del pasado mes de octubre cuando los investigadores
tuvieron noticias de que un individuo, de nacionalidad marroquí,
apodado «Jaime», se estaba dedicando a la distribución y venta de
diversas sustancias estupefacientes por diferentes lugares de esta
Isla.
El GIFA de la Guardia Civil comenzó a indagar sobre esta pista
hasta que se consiguió identificar al sospechoso. Se trataba de
Mohamed E.K., de 47 años de edad. Este individuo fue sometido a una
estrecha vigilancia y gracias a ello se observó como el individuo
mantenía reuniones con personas que todas ellas son conocidas por
su relación con el tráfico de drogas. El marroquí no sólo se
relacionaba con estas personas, sino que durante los días en los
que fue vigilado se observó que no ejercía ninguna actividad
laboral, pese a que solía alquilar vehículos con mucha
frecuencia.
Toda esta investigación dio su fruta en la tarde del pasado
viernes. Los agentes de la Guardia Civil fueron testigos de como
«Jaime» hacía entrega de casi dos kilos de hachís a otros dos
individuos, que le estaban esperando en un coche. Esta transacción
de droga se estaba realizando en s'Arenal. Los agentes
intervinieron y detuvieron a las tres personas. Además de Mohamed
E.K., los otros dos fueron identificados como Salvador M.M., de 50
años, y Santiago F.M., de 36. Uno de ellos escondía 21 gramos de
cocaína, mientras que el marroquí tenía en su poder 150 mil
pesetas. Más tarde se registró el piso del marroquí, y se hallaron
500 pastillas de éxtasis, 26.5 gramos de cocaína y varias joyas. En
ese momento se detuvo a la novia del individuo, llamada Diana G.P.,
de 29 años.
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