Hace dos meses el Comité de empresa de Serveis Ferroviaris de
Mallorca (SFM) y el sindicato Comisiones Obreras presentaron a la
dirección de la empresa un escrito reclamando la instalación de
señales de protección en la estación ferroviaria de Sa Pobla. El
responsable de acción sindical de CCOO, Antoni Cifre, explicó que
esta medida fue tomada a raíz de un estudio realizado por el comité
de empresa en el que se especificaba la necesidad de instalar
semáforos en la estación por motivos de seguridad. El responsable
sindical apuntó que el accidente ferroviario «en un principio
parece que es un fallo de frenada». Añadió que pudo haber influido
la poca visibilidad y la falta de señalización.
Esta versión es corroborada por uno de los pasajeros con los que
contactó Ultima Hora . Según esta versión, la
niebla intensa impidió ver el andén de la estación, pocos metros
antes de llegar y por lo tanto se frenó muy tarde. Según Cifre, un
final de estación como el de Sa Pobla puede resultar peligroso si
el maquinista frena en seco ya que el frenazo puede provocar un
efecto de deslizamiento.
Desde SFM, consideran que las estaciones están correctamente
señalizadas. Serveis Ferroviaris aseguró que cuando los maquinistas
inician el servicio disponen de 50 minutos para revisar las
máquinas. Una vez finalizado el servicio diario, la máquina dispone
de cuarenta minutos para llevar a cabo una última revisión.
La primera valoración de daños realizada por SFM estima que el
coste del coche motor se eleva a 1.202.024 euros (200 millones de
pesetas). También se recalca que el tope de hormigón reunía las
condiciones de seguridad por lo cual pudo canalizar el impacto. De
los cinco heridos ingresados en el Hospital de Muro, cuatro fueron
dados de alta ayer. El revisor continua ingresado en Son Dureta y
fue sometido a una operación si bién su vida no corre peligro.
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