José Manuel Sierra, concejal de Governació del Ajuntament de Palma,
y Guillem García, jefe del Cuerpo de Bomberos y presidente de la
Asociación Profesional de Técnicos de Bomberos, inauguraron ayer
unas jornadas técnicas sobre «Protecció passiva en edificis»,
organizadas por el Col.legi Oficial d'Enginyers Industrials
Superiors de Balears.
El incendio ocurrido el pasado lunes en una nave del Polígono de
Son Castelló sirvió como ejemplo de las graves consecuencias a las
que puede llevar el incumplimiento de la normativa contra
incendios. José Sierra afirmó que «tras este suceso se van a
debatir muchos aspectos. Por lo general, ante estos acontecimientos
la culpa la tienen los bomberos o la falta de agua. El año pasado
hubo otro gran incendio por el incumplimiento de las normas de
seguridad».
«Por parte del Ajuntament, -añade Sierra- se le da mucha
importancia al tema de la prevención, es el primer interesado en
que las normas se cumplan. Se trata de prevenir y de corregir los
defectos. Se debe cumplir la actual normativa, aprobada el pasado
mes de enero. Poco a poco las naves industriales se van adaptando a
sus directrices, si no habría que cerrar las tres cuartas partes de
los negocios en el Polígono de Son Castelló porque no cumplen con
las normas de seguridad».
Las jornadas se iniciaron con una conferencia de Rafael Rueda,
responsable de Prevención del Real Cuerpo de Bomberos de Málaga, y
continuaron por la tarde con otras tres centradas en sistemas de
ventilación, señalización de emergencia y cables eléctricos de alta
seguridad. Según afirmó Guillem García, «la idea de hacer estas
jornadas surgió hace un año a raíz de unos incendios. Se trata de
aumentar el nivel de formación, de que los edificios cumplan las
reglamentaciones mínimas. Pero no basta con cumplir sólo el
reglamento de seguridad».
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