El fiscal pide dos años de cárcel para el joven que destrozó el Crist de la Sang

La Fiscalía de Palma califica de delito de daños el acto que José María Sánchez Almendro, de 29 años de edad, protagonizó en la tarde del pasado día 19 de diciembre al entrar en la iglesia de la Anunciación, situada junto a la plaza del Hospital General de Palma, dirigirse hacia el Crist de la Sang, zarándearla hasta conseguir tirarla al suelo y acto seguido pisotear los restos de esta figura que, junto a la Mare de Dèu de Lluch, es la imagen que cuenta con más devotos en Mallorca. Por ello le pide dos años de cárcel. El individuo es un enfermo mental, aunque el fiscal cal entiende que sus facultades no están del todo anuladas. José María S.A., que además es drogadicto, ha estado varias veces ingresado en diversos centros psiquiátricos. De hecho, tres días antes de los hechos, es decir, el día 16 de diciembre, el joven fue dado de alta de la unidad psiquiátrica de Son Llàtzer. Como no tiene trabajo ni lugar donde dormir, el joven pasó las noche siguientes a la interperie hasta que el día 19 por la tarde acudió a la iglesia de la Anunciación y destrozó el Crist de la Sang. La pieza quedó destrozada en cientos de trozos, y sólo se salvó la cabeza. La figura estaba construida con corcho y es la gran protagonista de la procesión que se celebra el Jueves Santo en Mallorca. No se conoce el autor de esta figura de Jesucristo, pero se calcula que fue construida en el siglo XVI. Cada día por la iglesia pasaba una media de mil personas por delante de esta figura religiosa, sin duda la más visitada de todos los templos de la ciudad. Se da la circunstancia que éste no es el primer acto sacrílego que protagonizaba José María S.A. El pasado mes de abril ya entró en la iglesia dels Caputxins, en Palma, y destrozó dos imágenes religiosas. Por estos hechos, tal como adelantó Ultima Hora el pasado sábado, fue condenado a una pena de multa. Se da la circunstancia que pese a que estas figuras no tenían el valor histórico ni religioso que tiene el Crist de la Sang, la Fiscalía imputó al joven un delito contra el patrimonio artístico. Sin embargo, en esta ocasión no lo hace.