Javier Jiménez02/06/03 0:00
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El juzgado de instrucción número 8 de Palma ha abierto una investigación para aclarar el caso de Antonio Ferrer Gómez, un conocido pintor de Huesca que se encuentra hospitalizado en estado vegetativo después de haber estado a punto de ahogarse en s'Arenal y que, supuestamente, no recibió asistencia médica a tiempo por una negligencia del 112.

Fue entonces cuando uno de los testigos presenciales, según consta en la denuncia, llamó al teléfono de emergencias del 112 y pidió ayuda urgente «porque un hombre se está muriendo en la playa». «Desde ese teléfono hicieron caso omiso de las peticiones de ayuda y al final tuvimos que llamar al 061, que sí envió al lugar a una ambulancia», contaron ayer. Antonio fue evacuado al hospital de Son Llàtzer y los médicos determinaron que se encontraba en coma irreversible, es decir, en estado vegetativo y que existían muy pocas posibilidades de recuperación.

Estrella, su hija, y Pilar, su ex esposa, explicaron ayer a este periódico que Antonio, de 57 años, viajó a Mallorca el puente de la primera semana de mayo para ver a su hijo, de 15 años. El día 4, el pintor, el adolescente y unos amigos se desplazaron a la playa de Sometimes, en s'Arenal, aprovechando el buen tiempo y las vacaciones. El hombre se zambulló en el agua y entre bromas le pidió a su hijo que le tirara una pelota, para entrar en calor. Pese a que era un experto nadador al poco tiempo perdió la consciencia y se ahogó delante de él. La rápida reacción del menor y de un turista alemán impidió que el pintor falleciera en el agua, pero cuando fue arrastrado hasta la arena se encontraba en estado muy grave, con las constantes vitales muy debilitadas.

La víctima, casi deshauciada por completo, ha sido trasladada a San Juan de Dios y ahora su familia quiere que se aclare por qué el 112 «no hizo nada por él». «Lo que queremos es que esto no se vuelva a repetir con otra persona. La playa, ese día, estaba abierta al público, había muchísima gente, pero no había ni un socorrista y el puesto de la Cruz Roja estaba cerrado. Si a eso le añades lo que pasó con el 112 resulta que quizás se podría haber hecho mucho más por Antonio, y que ahora no estaría así», opinó su ex mujer, que reside en Palma.