El suceso se produjo a la una de la madrugada, cuando se
incendió la casa en la que vivían las niñas, sus dos hermanos
varones, de cuatro y doce años, y sus padres, que fueron
trasladados por equipos sanitarios al Complejo Hospitalario
Orensano.
El matrimonio consiguió rescatar a los niños, que sufrieron
quemaduras, aunque no pudieron sacar de la vivienda a las dos
niñas, que ocupaban la habitación más alejada de la entrada. Tras
la intervención de los bomberos, los cadáveres de las pequeñas
fueron recuperados a las 4:00 y a las 5:45 horas.
Fuentes de la Guardia Civil explicaron que la Policía Judicial
de este cuerpo investigó tras el incendio la vivienda, que quedó
calcinada, mientras que el juez de Ribadavia acudió al lugar del
siniestro para autorizar el levantamiento de los cuerpos.
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