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Una investigación judicial por homicidio y lesiones involuntarias intentará esclarecer por qué se desplomó ayer el techo de la más reciente terminal del principal aeropuerto de París, causando al menos cinco muertos y efectos similares a los de un terremoto.

La apertura de la investigación se anunció después de que el presidente Jacques Chirac expresase su pesar por el accidente y pidiese las «investigaciones necesarias para determinar sus causas lo antes posible». Además de la investigación judicial, Pierre Graff, presidente de Aeropuertos de París (ADP), que gestiona el aeródromo Roissy-Charles de Gaulle, donde se produjo la tragedia, informó también de la apertura de una investigación administrativa, y añadió que la sociedad ya ha puesto a sus expertos a indagar las razones de lo ocurrido.

Al menos cinco personas, posiblemente seis, murieron al desplomarse a las 06.57, hora local, una parte del techo sobre una pasarela usada para el embarque y desembarque de pasajeros de la terminal E2, inaugurada hace menos de un año. La incertidumbre sobre el número final de fallecidos se debe «a las dificultades encontradas para rescatar los cuerpos», según indicaron las fuentes judiciales consultadas.