«Soy inocente, pero no he recibido el apoyo de la familia de mi
mujer para buscar a la gente que la mató». En su turno de última
palabra, Hamid Guezzar volvió a repetir ante el tribunal del Jurado
que es inocente del cargo de asesinato que pesa contra él, y por el
que el fiscal y la acusación solicitan 25 años de cárcel.
Durante el día de ayer declararon varios inspectores y expertos
en toxicología, aunque la sesión hubo de suspenderse durante más de
una hora por un apagón en el Palacio de Justicia. Los informes
realizados sobre el cadáver de María Isabel Ferrer descartaron que
hubiese consumido drogas en los 15 días anteriores a su asesinato,
tal y como afirmaba el acusado.
En la tercera y última jornada de juicio se escucharon también
las conversaciones telefónicas en las que la madre de Ferrer pedía
a Guezzar, en tono angustiado, que le informase sobre el paradero
de su hija, a lo que éste contestaba con evasivas o, directamente,
colgando el teléfono. Un inspector que transcribió estas
conversaciones telefónicas indicó que el trato de Guezzar era de
«un absoluto desprecio hacia la familia de María Isabel
Ferrer».
Posteriormente, un testigo afirmó que oyó cómo un amigo suyo
decía que «Rasta» -tal y como Hamid Guezzar es conocido entre sus
amigos- le había llamado por teléfono para decirle que «había
matado a su novia».
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.