Las aguas contaminadas con todo tipo de desecho urbano todavía
cubren, hasta una altura de 1,5 metros, vastas áreas del este y el
norte de la ciudad y están siendo devueltas lentamente al lago
Pontchartrain.
Unidades militares y policiales seguirán la búsqueda metódica de
supervivientes de la inundación que siguió a la ruptura de diques
en varios puntos de Nueva Orleans. Unidades de la Guardia Nacional
emplean camiones altos con los cuales recorren los barrios todavía
anegados, pero no tienen autoridad legal para entrar a las
viviendas en busca de supervivientes o de cadáveres. Los soldados y
policías, que cubren sus rostros con máscaras para evitar el hedor
del agua estancada, emplean altavoces con los cuales instan a la
población a que salga de las viviendas. En sus recorridos por los
canales en que se han convertido las calles, los soldados observan
para encontrar indicios de supervivientes, como ropa lavada y
colgada a secar, o la presencia de perros bien alimentados.
Ha disminuido sustancialmente el número de incidentes violentos,
después de ocasiones en las que las fuerzas de seguridad fueron
blanco de disparos, aparentemente de merodeadores.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.