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La Audiencia Provincial ha condenado a 12 años de prisión a José R.R., el hombre que en mayo de 2004 entró en la vivienda de su mujer, ubicada en Son Gotleu, y le prendió fuego. José, que tenía dictada una orden de alejamiento, telefoneó a su esposa y le dijo literalmente: «voy a hacer una cosa sonada, y la primera que vas a caer vas a ser tú». Minutos más tarde se presentó en la vivienda y llamó a la puerta. La mujer, al ver que era él, decidió no abrirle mientras su hija llamaba por teléfono a la policía. Ambas abandonaron la casa ante el temor de que pudiera regresar, tal y como efectivamente pasó.

Sobre las 04.30 horas de la madrugada, José R.R. se presentó nuevamente en la casa después de comprar un bidón de gasolina. Una vez en el edificio, subió a la azotea y se descolgó hasta el balcón de la vivienda de su mujer, en una octava planta, entró en ella y le prendió fuego. Según la sentencia dictada por la Audiencia, el acusado «ignoraba que su esposa y las hijas del matrimonio se hallaban ausentes del domicilio».

El acusado ha sido finalmente condenado a 12 años de cárcel, frente a los 22 que solicitaba inicialmente el fiscal. No obstante su letrado, Bartomeu Oliver, ha anunciado ya que presentará un recurso de casación.