TW
0

AGENCIAS-PAKISTÀN
La ONU pidió ayer más helicópteros, agua, tiendas de campaña y fondos para la situación «desesperada» que vive Pakistán, donde «se pierde la batalla contrarreloj», y auguró que la recuperación de ese país llevará «años».

«Estamos perdiendo la batalla contrarreloj en los pueblos pequeños» y «necesitamos triplicar el número de helicóptero, más agua, más tiendas y más dinero», manifestó Jan Egeland, subsecretario para Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas.

Egeland visitó ayer algunas de las áreas más afectadas por el terremoto del sábado, como Muzaffarabad, capital de la Cachemira paquistaní, para vigilar los esfuerzos de rescate y su evaluación de la situación creada por el seísmo no pudo ser más pesimista, a pesar de que la ayuda internacional ha empezado a llegar a las zonas más remotas.

«Nunca he visto una devastación semejante. Llevamos seis días de operaciones y, cada día, la escala de la devastación es mayor», apuntó.

«Esta situación es desesperada. Aunque hacemos progresos en las áreas más pobladas, es demasiado difícil alcanzar otras», aseveró el alto representante de la ONU, quien dijo además que llevará «años» reconstruir este país.

Los miembros de los equipos de rescate trabajan contrarreloj para intentar buscar más supervivientes del terremoto que ha causado la muerte de al menos 25.000 personas en Pakistán, aunque esa cifra podría llegar a superar los 40.000.

Cinco días después de la catástrofe, grupos de rescate y familiares de los desaparecidos aguzan el oído para localizar cualquier señal de vida entre los escombros de los miles de edificios caídos, como la famosa torre Margalla de Islamabad.