La directora de Emergencias del Consell de Mallorca, María José Rodríguez, responsables de los Bombers de la institución insular y un ingeniero visitaron ayer las zonas más afectadas por la fuerte tormenta del pasado martes en Alaró. Toni Rebassa, teniente de alcalde del Ajuntament, les acompañó en el recorrido, durante el que pudieron conocer en primera persona las causas de las inundaciones y la opinión de vecinos perjudicados.
En primer lugar, visitaron el Colegio Público, cuyo patio se inundó de agua y barro al desbordarse el torrente. Acto seguido recorrieron las calles Pontarró y Solleric, entre otras, interesándose por la red de pluviales y las posibles actuaciones de mejora que se podrían llevar a cabo. En último lugar, acudieron al punto donde falleció la mujer de 83 años arrastrada por una tromba de agua.
Se trata de dos viviendas juntas, de planta baja y primer piso, separadas por un tabique, en el número 67 de la calle Solleric. A su izquierda hay un terreno a un nivel superior. Parte de la pared de piedra que separa el terreno de la primera vivienda cedió y el agua entró en la casa por la parte de atrás, llegando a una altura de 1,80 metros. Una madre y sus dos niñas se refugiaron en el primer piso. La fuerza del agua derribó el tabique y entró en casa de la víctima. Cuando ésta fue a abrir la puerta para que saliera el agua que entraba desde la casa contigua, fue arrastrada por la riada que venía por la calle.
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