Uno de los niños falleció antes de ser llevado al centro clínico de Kosevo, dos murieron una vez ingresados, y otros dos que habían sufrido heridas graves y estaban en estado crítico perecieron más tarde como consecuencia de las quemaduras.
Todos los bebés afectados por el incendio fueron trasladados a este hospital, algunos en estado grave al presentar un cuadro de intoxicación.
Además, la enfermera Suada Cengic, de 45 años de edad, también sufrió quemaduras y síntomas de intoxicación por el humo inhalado mientras intentaba salvar a los niños, aunque su vida no corre peligro, indicaron fuentes del centro.
El fuego comenzó, por causas desconocidas, en torno a las seis de la mañana, hora local, en el tercer piso del edificio y rápidamente se extendió a las habitaciones de los niños más pequeños. Los bomberos tardaron sólo un cuarto de hora en apagarlo, pero produjo mucho humo, declaró el retén de la brigada de bomberos en Sarajevo.
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