Los funcionarios multiplicaron sus esfuerzos en localizar sobre el asfalto, donde se halló sangre de Manuel, restos de chapa del vehículo que supuestamente estuvo implicado en el accidente. En este sentido, fuentes próximas a la investigación señalaron que hay «pistas interesantes» que se están siguiendo y que podrían ser de vital trascendencia para la resolución del caso. Todo indica que el vecino de Capdepera subió a esa montaña para meditar, ya que no era la primera vez que lo hacía. De hecho, sus amigos lo buscaron por aquel paraje porque sabían que había posibilidades de que estuviera allí.
En Capdepera la noticia de la muerte del joven causó conmoción. Por la mañana, en la mayoría de los bares los vecinos leían la página de Ultima Hora que informaba de lo ocurrido. «No sabemos gran cosa porque nos dicen que está el caso bajo investigación judicial, pero por la radio ya han dicho que era un crimen. No sabemos qué pensar, hay policías y guardias civiles por toda aquella montaña», contó Joan, un jubilado.
El responsable de un bar, que dijo que conocía a la familia del fallecido, relató que «circulan versiones muy distintas de lo ocurrido. Lo que parece claro es que la muerte de ese chico no fue natural, dicen que lo atropellaron».
El joven era muy conocido en Capdepera y sus amigos destacan que «nunca se metía en líos, era muy tranquilo y buena persona». El caso podría quedar aclarado en los próximos días.
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