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JULIO BASTIDA Eran las dos de la madrugada de ayer, cuando un varón de 48 años de edad que conducía una Piaggio Porter de siete plazas protagonizó un espectacular accidente en el que milagrosamente consiguió salvar la vida.

Los hechos se produjeron en la carretera de Establiments-Esporles, a la altura del número 68, cuando, según las primeras investigaciones realizadas por los agentes desplazados a la zona, un conductor que circulaba de Esporles dirección Palma, por causas que se desconocen y que están en proceso de investigación por la Unidad de Atestados de la Policía Local, perdió el control del vehículo y colisionó contra un turismo que se encontraba aparcado en la zona. A raíz del impacto sufrido, la Piaggio Porter volcó provocando un espectacular accidente.

Rápidamente se desplazaron al lugar del siniestro varias dotaciones de los Bombers de Palma, Policía Local y el 061.
Los bomberos tardaron aproximadamente unos 15 minutos en conseguir sacar al conductor dado que quedó atrapado entre los hierros retorcidos del vehículo y la dificultad para conseguir extraerlo era máxima.

El conductor que resultó herido tras el accidente, según las pruebas realizadas conducía bajo los efectos del alcohol y sin la correspondiente licencia para conducir. Además, la sorpresa con la que se encontraron los agentes es que el vehículo era robado.