Tres de los siete miembros de la fraternidad de moteros detenidos en Mallorca por narcotráfico están considerados como los 'cabecillas' de la banda por parte de la Guardia Civil, que lleva la investigación del caso. Seis de los arrestados continuaban ayer en los calabozos de la Comandancia de Palma y hoy serán puestos a disposición judicial. El séptimo fue puesto en libertad.
Los sospechosos se acogieron a su derecho a no declarar ante la Guardia Civil. Los arrestos y registros se llevaron a cabo el miércoles por la tarde-noche en Palma, Binissalem, Petra, Vilafranca y Montuïri. Los esfuerzos de los investigadores se centraron en la sede de la fraternidad de moteros, que se denominan Corsarios de Mallorca, que se encuentra junto al Foro de Mallorca, en Binissalem.
En el operativo se intervinieron 120 kilos de hachís, 160 dosis de cocaína y numerosos cogollos de marihuana dispuesta para la venta, así como balanzas de precisión, una escopeta y dinero.
El precio de la droga intervenida asciende a unos 400.000 euros. Según las pruebas recogidas, tres de los miembros de la fraternidad serían los que dirigían la organización y los otros cuatro colaboraban, en menor medida, en la logística y distribución de grandes cantidades de hachís entre la Península y Mallorca.
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