El cuerpo sin vida de José Torrens aparece tapado con una manta junto al tren que lo arrolló. Foto: ALEJANDRO SEPÚLVEDA

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JAVIER JIMÉNEZ

José Torrens, un vecino de Palma que ayer cumplía 80 años, murió por la mañana arrollado por el tren de Inca, a su paso por la estación de Verge de Lluc. El hombre iba caminando por las vías y cuando detectó al convoy intentó apartarse contra la pared, pero el espacio era insuficiencia y la máquina lo destrozó.

Poco después de las diez de la mañana el octogenario paseaba por las inmediaciones del andén, en un tramo de vías. Los vecinos de la zona contaron que no era la primera vez que lo hacía y que era habitual ver a José Torrens por los alrededores de la estación, buscando caracoles o simplemente paseando. Ayer, cuando José celebraba su 80 aniversario, sobrevino la tragedia. Una mujer fue testigo de la secuencia, tan cruda como inexorable. El tren se acercó al andén, a muy poca velocidad, y el maquinista detectó al hombre sobre las vías. Activó rápidamente las señales acústicas y José se apartó a un lado, apretujándose contra una pared. El conductor intentó desesperadamente frenar, y estuvo a punto de conseguirlo, aunque al final el ferrocarril se llevó por delante al vecino de Palma, que quedó mortalmente atrapado entre los hierros.

La testigo presencial del atropello sufrió un ataque de ansiedad y tuvo que ser atendida por el personal de Serveis Ferroviaris. Luego la Policía Local le tomó declaración y su testimonio ha sido clave en la confección del atestado.

Nada más tenerse conocimiento del atropello, hasta la estación de Verge de Lluc se desplazaron agentes de la Policía Local de Palma, ambulancias del 061 y efectivos del Cuerpo Nacional de Policía, así como bomberos que liberaron el cuerpo atrapado del octogenario.

Los médicos comprobaron que no se podía hacer nada por José Torrens y el juzgado de guardia fue informado del fallecimiento. El conseller de Movilitat, Gabriel Vicens, se desplazó hasta la estación de Verge de Lluc, acompañado del gerente de Serveis Ferroviaris, Jaume Jaume.

La empresa funeraria retiró los restos mortales del hombre atropellado, al que hoy está previsto que se le practique la autopsia, y la policía y los bomberos realizaron dos informes paralelos sobre las causas del accidente, que apuntan a una imprudencia por parte del peatón. Hace unos días, en esa misma estación palmesana, se incendió un vagón del tren y unos 200 pasajeros fueron evacuados a toda prisa. La causa del siniestro, en aquella ocasión, fue un cortocircuito.