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Un vehículo se sale de la carretera y choca contra un poste de electricidad, los ocupantes quedan atrapados en el interior y hay cables de alta tensión por el suelo. ¿Cómo se debe actuar en un siniestro de estas características? En situaciones como ésta tuvieron que desenvolverse 13 bomberos de Palma, Mallorca y Menorca, que están siguiendo el curso para ascender a cabo, organizado por la Escola Balear d'Administració Pública (EBAP) del Govern balear.

A lo largo de la semana pasada se han llevado a cabo diversas sesiones teóricas y prácticas, impartidas por el sargento de los Bombers de Palma Rafel Matamalas y el cabo de los Bombers de Mallorca Bernat Franco. Los ejercicios se han realizado en las instalaciones que el Govern tiene en Son Banya y han simulado accidentes reales con una serie de dificultades añadidas.

En este sentido, Bernat Franco explica que estas instalaciones «ofrecen muchas más posibilidades, porque si la práctica se hace en un parque de bomberos siempre trabajamos sobre el asfalto, pero hay accidentes en que los coches se salen de la carretera y acaban en el campo, o caen por un terraplén, y aquí se pueden simular estos casos».

Tanto Franco como Matamalas apuntan que, básicamente, «los simulacros que hemos realizado consisten en que hay un accidente con una persona atrapada en el coche, los bomberos llegan en primer lugar y hay que intervenir». «Primero toca hacer una evaluación de la zona, analizar los riesgos que hay para poder sacar a la víctima lo más rápido posible con la mayor seguridad, y ver si hay víctimas que han salido despedidas. Se estabiliza el vehículo para evitar movimientos, ya que la víctima puede tener una posible lesión medular, se le practican los primeros auxilios mientras se espera la llegada de las ambulancias y después se procede a su extracción del vehículo», añaden.

En los ejercicios realizados esta semana han participado dos grupos, en turnos de mañana y tarde, uno de ellos de siete bomberos y otro de seis. «En cada maniobra hay un mando que ordena y el resto actúa a sus órdenes», apunta Bernat Franco, quien destaca la importancia de estas prácticas «porque estamos hablando de salvar vidas humanas».