De acuerdo con los datos facilitados por la Oficina Periférica de Comunicación (OPC) de la Comandancia de Palma, el robo se denunció el pasado 2 de enero y se cometió en una fecha indeterminada, entre los días 31 de diciembre y principios de año.
Puerta
Para acceder al interior de las instalaciones docentes, los ladrones forzaron la puerta de acceso y se dirigieron directamente hasta el aula donde se guardaban los ordenadores portátiles recién entregados al colegio. De hecho, hacía pocos días que habían llegado y los alumnos apenas habían tenido tiempo de practicar con ellos.
Una vez en la clase, se apoderaron de catorce ordenadores. La Guardia Civil abrió una investigación y a los agentes les llamó poderosamente la atención que los delincuentes sabían dónde estaban las computadoras. Siguiendo algunas pistas averiguaron que los menores que habían entrado en el colegio eran dos y que tras el robo habían intentado vender el género en Campos y ses Salines, tras contactar con algunos particulares. La jugada no les salió bien porque en las tapas aparecía el logotipo de la Conselleria d'Educació y del Gobierno de España, y al final acabaron regalando algunos de los ejemplares sustraídos en Fray Joan Ballester. El lunes, los agentes localizaron por fin a los dos sospechosos, uno de los cuales había estudiado en el centro asaltado. Los funcionarios han recuperado ocho de los ordenadores portátiles y en la actualidad están llevando a cabo ímprobas gestiones para localizar el resto.
Ahora se está investigando si los dos adolescentes recibieron ayuda o información de otros estudiantes.
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