El otorrino ha sido condenado a 77 años de cárcel por abusar de varias de sus pacientes. | ALEX SEPULVEDA

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Según la sentencia que se hizo pública ayer, el doctor Javier Pérez Obón, de 47 años, actuó con ánimo libidinoso y mediante actuaciones que no tenían ninguna evidente intención médica. Además, el acusado aprovechaba la confianza que depositaban en él sus pacientes.
El otorrino que fotografió desnudas y abusó sexualmente de sus pacientes quedó ayer condenado a 77 años por sentencia firme. Además, el doctor deberá indemnizar a cada una sus víctimas con 3.000 euros. Además, la sentencia ha rechazado la petición de una de las víctimas que reclamaba hasta 30.000 euros por los daños sufridos.
Así, en la sentencia de ayer, quedó probado que el otorrino, durante el ejercicio de su profesión y entre el 2004 y el 2008, pedía a sus pacientes que se desanudar y se tumbaran en una camilla. Posteriormente, les ponía unas gafas opacas para que no pudieran ver las verdaderas intenciones del doctor. Además, el acusado les ponía esparadrapos que les sujetaban los brazos y las piernas para dificultar las movilidad de las mujeres.
Según la sentencia, durante los cuatros años que ejerció su profesión en la Clínica Rotger de Palma, el doctor siguió los mismos patrones con cada una de sus pacientes, que llegaban a su consulta por problemas de vértigo o mareos.
A una de ellas llegó, presuntamente, a decirle que muchas pacientes se negaban a desnudarse por el hecho de tener que quedarse en ropa interior, a lo que la mujer le respondió que él era el médico y que «si lo consideraba necesario y le ayudaba a curarse, accedería».