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La Policía Judicial de la Guardia Civil se llevó ayer las cintas de la cámara de seguridad de un edificio del Port d'Andratx que da a la parte trasera de la casa de Nuria Orol. Los agentes están analizando el vídeo en busca del asesino de la joven. El principal acusado, Zouhair A., continúa detenido.

El edificio de apartamentos Marina tiene la cámara de seguridad enfocada al bloque de la calle Gabriel Roca número 2, donde fue brutalmente asesinada Nuria. Los agentes sospechan que el asesino pudo salir por la parte trasera de la casa, por lo que la grabación podría despejar muchas dudas.

De momento los investigadores han tomado declaración a un total de quince personas, la mayoría vecinos de Andratx y del Port. Algunos han entrado en contradicciones sobre lo que vieron entre el domingo y el lunes por la noche, cuando se encontró el cadáver de la joven. En un principio, el examen forense apuntó a que podía levar 24 horas muerta, pero tampoco se descarta que el margen fuera inferior, en concreto de unas quince horas.

Ayer también trascendió que la Policía Judicial ha estado buscando estos días a un cocinero que en la madrugada del sábado estuvo con Nuria en la discoteca Barracuda del Port d'Andratx. Tras descubrirse el crimen, el hombre desapareció, lo que despertó algunas sospechas. Ahora, ha sido localizado en Asturias y la Guardia Civil tiene previsto tomarle declaración en breve.

Reconstrucción

Ayer por la tarde el capitán de la Policía Judicial y varios agentes regresaron al escenario del crimen, junto a Zouhair A. La comitiva reconstruyó una vez más la llegada al piso del marroquí, cuando dijo que había encontrado el cuerpo de su ex novia.

Los agentes tienen hasta el domingo como fecha máxima para entregar al sospechoso en el juzgado, con pruebas suficientes para encarcelarlo. Hasta la fecha, la ex pareja de Nuria ha negado de forma reiterada que tuviera algo que ver con el crimen. Durante el registro que se llevó a cabo en su casa, en la calle Quince Hermanos, se encontraron algunas papelinas de droga, por lo que ha sido acusado también de un delito de narcotráfico. Al parecer, la Benemérita ha recogido declaraciones de algunos toxicómanos que reconocieron haberle comprado sustancias estupefacientes.