Marian Pataros es una vecina de Palma que nunca olvidará su última visita al museo. Hace unos días, acudió al Casal Solleric (centro de exposiciones y documentación del arte contemporáneo) para ver la exposición sobre el Arxiduc Lluis Salvador y le tocó vivir una de sus peores pesadillas. Simulando a Ben Stiller y Robien Williams en la comedia estadounidense Night at the Museum (Una noche en el museo) a nuestra protagonista también la dejaron encerrada en el museo.
«Me encerraron en el Casal Solleric y comencé a gritar como una loca»
También en Sucesos
- Este es el pescado con más omega 3 que el atún y el salmón que te ayudará a fortalecer la memoria
- Ni Valldemossa ni Fornalutx: este es el pueblo más bonito de Baleares según National Geographic
- Fallece la esposa del mallorquín Rafel Pol, ayudante de Luis Enrique en el PSG
- Descubre la planta milenaria que combate la inflamación y ayuda a mejorar la memoria
- Giro de 180º del tiempo en Mallorca
33 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
vaya vaya, la peor experiencia de su vida...ahora...a ...por la indemnizacionnnnn
No estaba en el Museo ni el vigilante ni el minimo atisbo de cultura en su contenido. Que pais!!!!!
El museo debe tener un horario expuesto y visible para todo el que entra. Si es así, era tan fácil como RESPETARLO y haber salido a la hora que tocaba.
Querida Marian. dos puntos: dices que estuviste toda la tarde viendo museos y galerías por esta Palma nuestra. Ir al Casal Solleric, después de ir de galerías, de museos.......es un error. El Casal Solleric no puede digerir, no acepta, no admite Personas que tengan buen gusto, opinión artística, cerebro, etc.... Por eso el intento de engullirte. Te admiro, si necesitas terapia, no lo dudes, ves al Reina Sofia. Ánimos.
Que ganas tenía esta señora de salir en el periodico!!!!!!!!
Notición.
Menuda vidorra si la peor experiencia de su vida es quedarse 10 minutos encerrada en un museo en el Borne. En Siria lloran de pena por ella. Mediapro deberia dedicarle una serie reality a su vida.
Pues si esa es la peor experiencia de su vida no se puede quejar, vida tranquila lleva hasta ahora.
Jolines con las medidas de seguridad con que cuentan nuestros museos, no seria de extrañar que alguna mañana apareciera con las cuatro paredes
Hay mucho cap buit opinando, haciendo juicios de intenciones sin venir a cuento. Los hechos son los que son: alguien la dejó encerrada, y no le resultó muy agradable. Algún responsable debe haber. Todo lo demás sobra.